top of page

Jairo Ubiaño: Un Modelo Para El Éxito [Entrevista]

Jairo Ubiaño (Dani Fernández, Gloria Gaynor, Abraham Mateo) representa quizás a la nueva generación que ha crecido en nuestro país y que empuja hacia adelante a nuestro instrumento. Con él tenemos una conversación tremendamente amena y divertida, donde descubrimos secretos para el éxito que no son tan secretos. Además, profundizamos en maneras de ver el instrumento de una forma más holística, ayudándonos de otras artes, entretenimiento y filosofía.


Hola Jairo. Has trabajado y girando con gente de mucho calibre. ¿Qué factores ves que hay en común entre ellos?

Es algo que me pregunto siempre. Me encanta leer, y escuchar podcasts, entrevistas con gente que son lo mejor en lo suyo. La gente con la que yo he coincidido, a los que he considerado que son musicazos, tienen cosas en común pero a la vez me he encontrado con perfiles de distintos tipos. Intentando resumirlo en dos tipos de músico. Uno sería el típico que empezó a tocar con tres o cuatro años, familia de músicos, y que se ha desarrollado de forma más desestructurada, más aleatoria, pero que debido a un cierto talento natural, una cierta exposición a la música desde muy pequeño, tiene ciertas facultades y dispone de un mayor número de horas acumuladas, aunque sean unas horas desperdiciadas al final al empezar tan pronto, cuando tú llevas 20 años, el número de horas son las que son. Por otra parte, tienes la gente que empezó más tarde, en su adolescencia, y que debido a esa exposición más tardía, se ha visto obligado a aprovechar mejor el tiempo. No es lo mismo empezar con tres que con dieciocho años, en cambio, tanto uno como el otro tocan muy bien y nos preguntamos cómo puede ser eso. La única diferencia es que el que ha empezado más tarde, han tenido que tomar ciertos atajos y decir que no a ciertas cosas. Si empiezas pronto, puedes tocar jazz porque tu padre es batería de jazz, y a los dieciséis cansarte de ese estilo y empezar con otra cosa completamente distinta, porque tienes mucho tiempo por delante a la vez que llevas años estudiando que te van a aportar algo. Yo veo eso, dos tipos, el que es un poco más desastre y presume de ello abiertamente, y el que es un poco más organizado, porque se ha visto obligado a ello también con el tiempo del que disponía. Más allá de eso, lo que veo en común, en por ejemplo ser consciente de tu talento. Con Gloria Gaynor hay gente que ha girado con Beyoncé, Ed Sheeran, Amy Winehouse… y cuando hablo con ellos y conversas un poco acerca de su nivel, no hay nada de ‘‘bueno hombre, nah… aún me queda mucho…’’ sino que ellos son consientes de su nivel, pero, y esto e lo importante, son conscientes más aún de lo que les queda por trabajar.


¨Porque cuando tú intentas aprender a aprender, te sirve para absolutamente todo.¨


Cuando uno empieza a autoboicotearse, repitiéndose que no es nadie porque se supone que hay que decir eso, hay una parte de tu cerebro que se lo cree, es lo que yo veo, yo no me imagino a cualquiera de los jugadores de los que entrenaba Tim Grover diciendo ‘’no, yo realmente no sé jugar’’ sin o que todos ellos eran conscientes de que eran grandes profesionales. Ser consciente de eso, te crea cierta obligación contigo mismo y con tu equipo o banda de seguir trabajando para estar a la altura, por respecto a tus compañeros y al artista con el que trabajas. A la autoconsciencia de su nivel, se une un compromiso por seguir trabajando en lo que se puede mejorar. Saber donde estás y todo lo que te queda. Esto es ser un eterno estudiante. No hay un objetivo final, sino que siempre hay un ‘’¿y ahora qué?’’

Lo que digo, es muy importante no crear una falsa humildad, porque en el momento en el que no crees en tu nivel también te exiges menos. En cambio si piensas que hay gente muchísimo mejor, porque tiene que haberla y la habrá siempre, consideras que te puedes defender y no eres un desastre, también te exigirás más. Y voy a añadir una cosa. Esta gente de tanto nivel he visto que también son muy buenos en algún otro aspecto. Todos tienen algún hobby, casi siempre relacionado con el deporte, en el que son muy buenos. Tienen esa inquietud por descubrir y aprender otras cosas, lo cual bajo mi experiencia les ayuda en la música. A mí a veces realizar otras actividades e intentar esforzarme en eso me ha ayudado muchísimo en el tema musical. Porque cuando tú intentas aprender a aprender, te sirve para absolutamente todo.


[…]


Es importante saber en qué esforzarse y qué trabajar. Malgastar tiempo en algo que apoya poco o ningún beneficio no es nada producente por definición.

Sí, al final tenemos que recordar que hay dos formas de tocar la batería, y tienes que saber en qué situación estás. Una sería, cuando estás en un proyecto creativo en el que tienes la oportunidad de expresarte; y luego, lo más habitual, cuando estás acompañando a gente. En ese momento, dependiendo del estilo y artista, puedes tener más ‘hueco’ o no, pero siempre va a ser distinto a cuando estás en modo creativo. Es importante entender tu papel en todo momento y qué es lo que puedes utilizar y lo que no.




Efectivamente. Es la importancia del autoconocimiento, sea de tu rol, de tus habilidades, tus carencias, lo que tú puedes controlar… lo que igual te recuerda un poco al estoicismo si no me equivoco (risas…). Explícanos qué es y cómo lo aplicas.

(risas…) Pues mira, dentro de la filosofía, religión… buscaba unos principios a los que agarrarme, de alguna manera. Hay gente que valoras más unas cosas u otras. Tras buscar mucho, encontré en el estoicismo algo a lo que aferrarme. A pesar de ser una enseñanza antigua, sigue siendo algo totalmente vigente. Recoge enseñanzas de personajes históricos com oMarco Aurelio o Séneca, que dejaron escritas pautas y formas de entender y reaccionar. Tiene muchas máximas, pero una de ellas es que, por mucho que ocurra a nuestro alrededor, lo único sobre lo que tienes absoluto control son tus actos y tus pensamientos. Yo no puedo controlar que salga a la calle y pierda el autobús, podría controlar salir antes pero una vez perdido, no lo puedo hacer que vuelva. Puedo cabrearme, insultar al conductor y estar todo el día malhumorado y pagarlo con la gente que me voy encontrando, o puedo simplemente pensar en porqué lo he perdido, por ejemplo me he levantado tarde porque me quedé hasta tarde viendo una serie. Entonces, para que mañana no me ocurra lo mismo puedo solucionarlo de equis manera. Eso, como ejemplo básico, pero de la misma manera podemos mirar distintas situaciones mucho más duras que nos ocurrirán en nuestra vida, como puede ser una ruptura, que te despidan o perder un familiar. Entonces, el estoicismo se centra en controlar como piensas y reaccionas frente a lo que te ocurra, y no dejar que ese acontecimiento externo domine tu parte interna. Hay muchas enseñanzas que tiene, y de hecho, acabo de grabar un disco con mi amigo Victor Elías (Taburete, Lola Índigo, Dani Fernández…) y cada canción tiene de título una enseñanza estoica, en latín. La música es instrumental, y queríamos que los títulos fuesen internacionales que todo el mundo pudiese entender. Por ejemplo, una de estas enseñanzas, ´Premeditato Malorum´, se basa en anticiparte a lo que te pueda ocurrir o ponerte en situación.

‘‘Es importante entender tu papel en todo momento y qué es lo que puedes utilizar y lo que no.’’

Por ejemplo, si yo ahora me voy a mudar a otra ciudad, soy de Talavera de la Reina y me quiero ir a Nueva York. Puedo estar durante años acojonado pensando en lo que pueda pasar, y ese miedo, lo normal, es que me acabe paralizando y que haga que no me mude, como le ha pasado a mucha gente, que por miedo no ha hecho ciertas cosas. El ‘Premeditato Malorum’ nos invita a analizar, mediante papel y boli, y anotar concretamente cuáles son las peores cosas que nos pueden suceder ante ese miedo. Por ejemplo, si me da miedo mudarme a Nueva York, voy a anotar, por ejemplo, que lo peor que me pueda pasar es quedarme sin dinero y sin trabajo, y detallo qué voy a hacer si eso ocurre, desarrollando un plan para esto. De esta manera le perdemos el miedo porque descubres que no es tan mala y que tiene solución. Al fin y al cabo, si te vas a otra ciudad, en la mayoría de los casos, si te quedas sin trabajo siempre puedes pedir ayuda a un familiar, amigos o volverte a casa. Si lo peor que te puede pasar es volver a casa, realmente estás volviendo a la casilla de salida, con lo cual no has perdido nada, sin embargo has ganado vivencias, y nunca sabes, quizás has hecho unos contactos allí, y tras volver, en unos años te llaman para una gira a lo mejor, o no, porque no tiene porqué pasar. Al final, el universo no te debe nada. Igual te vas allí esperando conseguir todo. Luego no lo consigues, y no pasa nada. Vuelves y ya está. Has aprendido cosas que te van a aportar muchísimo, y aunque vuelvas, realmente no estás donde empezaste porque has aprendido cosas pese a todo. Por eso me gusta mucho el ‘Premeditato Malorum’, porque cuando tengas miedo a algo, dedicas un rato a pensar en lo peor que puede pasar, cómo actuar, lo que te prepara por si ocurre alguna desgracia, de modo que si algo malo ocurre, ya estás preparado porque tienes un plan y no te pilla de primeras. Además de esto, me encanta otra enseñanza com es el ‘Amor Fati’. Hace referencia a que aceptes el destino y todo lo que ocurre.


Para escuchar el episodio al completo clickea aquí.

Jairo Ubiaño profundiza en esto y más temas como máximas para la práctica. Esperamos que te guste :)

Comments


  • Negro del icono de Instagram
  • Negro Twitter Icono
  • Negro Facebook Icono
  • Negro del icono de YouTube
  • Negro del icono de Spotify
  • Negro Icono RSS

Somos un medio de comunicación, difusión y educación para aquel baterista que quiere estar al tanto de lo que ocurre en nuestra industria. El Groove cuenta con un podcast dedicado a entrevistar a los grandes baterías del panorama nacional e internacional.

© 2020 por el groove | Carlos Coronado

bottom of page